"Excelente maestro es aquel que,
enseñando poco, hace nacer en el alumno un deseo grande de
aprender"


Arturo Graf (1848-1913)


domingo, 13 de mayo de 2012

FORO


INVITAMOS A DISCUTIR EN RELACION A:


 "LAS SIETE PREGUNTAS QUE DEBE SABER RESPONDER AHORA EL EDUCADOR DEL FUTURO"



1. ¿Cómo lograr que los alumnos asuman el error como la instancia de trasformar los conocimientos existentes y construir nuevas realidades?


2. ¿Cuáles son los principales conocimientos que debemos construir junto a nuestros alumnos para aprender a convivir bajo la mirada de la diversidad de realidades sesgadas por la propia experiencia?


3. ¿Cómo instaurar la noción de democracia en los alumnos bajo un sistema donde los principales lineamientos sociales no lo son?


4. ¿Cómo  potenciar al alumno desde el imprinting cultural que lo identifica y llevarlo a pasar nuevas fronteras?


5. ¿Cómo forjar nuestra identidad y mantenerla presente en la interacción vertiginosa de la sociedad del conocimiento?

6. ¿Cómo generar conocimientos a través de la asimilación de incertidumbres sin temor de desprendernos de nuestras certezas?


7. ¿Es la comprensión humana e intelectual la base de la educación del futuro?

Estado del Arte





            En el libro “El árbol del conocimiento”, Humberto Maturana y Francisco Varela, (1984), relatan la importancia de conocer nuestros orígenes, como seres que comienzan una evolución desde lo cósmico, pasando por lo celular, la organización de lo metacelular y dominios conductuales, la clausura operacional del sistema nervioso y los dominios lingüísticos y el lenguaje, y como todo esto lleva al individuo a formar parte de la sociedad. Al igual que Edgar Morín en el capítulo III “Enseñar la condición humana”, estos autores afirman que el individuo es y se forma desde el universo y que su constante organización ha generado su evolución a un ser social a través del lenguaje. Es así como llegan a la conclusión de que “los fenómenos sociales fundamentados en un acoplamiento lingüístico dan origen al lenguaje, y cómo el lenguaje desde nuestra experiencia cotidiana del conocer en él, nos permite generar la explicación de su origen. El comienzo es el final”.

Con el título el “Conocimiento del Conocimiento Obliga”, Maturana y Varela hacen referencia a la importancia de tomar una actitud de vigilancia contra las certezas, reconociendo que las certidumbres no son prueba de verdad. Es así como en el texto de  Morín hace referencia a que el hombre se ha instalado en la seguridad de las teorías sin tener la capacidad de acoger las nuevas propuestas que crean posibilidades de nuevos conocimientos.

Comentarios a la obra "Los siete saberes necesarios para la Educación del futuro"



 
a)      Desafíos para el educador: barreras a derribar.

Inicialmente, debemos entender que el conocimiento es una interpretación limitada de nuestros sentidos hasta el sesgo de nuestra propia idiosincrasia, limitando la construcción de nuevos conocimientos pedagógico basado en modelos propios para nuestro contexto sociocultural. La incertidumbre se visualiza como nuestra principal limitante, desaprovechando la oportunidad de poder internalizarla para dar respuestas a nuevos desafíos de la educación.
La desarticulación del conocimiento se plantea como otra barrera, evidenciando la entrega de información aislada del contexto, e interpretándose como carente de sentido, organización y articulación. Esto imposibilita al alumno de acceder al conocimiento contextualizado atendiendo a la multidimensionalidad del ser humano.
En cuanto, el destino planetario de los seres humanos es una realidad clave hasta ahora ignorada por la educación. Para conseguir que la unidad humana asegure y favorezca la diversidad se debe dar a conocer inicialmente el origen de nuestra condición, en donde se generan interacciones entre individuos que construyen la sociedad, certificando el sentimiento de la propia identidad y de su cultura. Por lo tanto, la educación debe afianzar este principio de unidad formando seres tolerantes en diversidad, destacando que el destino individual se entrelaza con el social. Siguiendo la idea anterior, se desprende que las sociedades viven aisladas olvidando la identidad terrenal que comparten desvinculándose de la primera y única patria, como señala Morín: “El mundo está cada vez mas devastado por la incomprensión”.
La educación nos entrega actualmente solo el conocimiento de las certezas, dejando desprovisto de contenido el análisis de las incertidumbres para construir nuevos conocimientos, a través de la búsqueda de las respuestas, que nos permitan afrontar los riesgos y desequilibrios a lo largo de este camino.
La educación del futuro debe plantearse, por ello, como la educación por la paz en donde el desarrollo de la comprensión del individuo le permita empatizar con el otro y su entorno de manera desinteresada.
Finalmente, la educación ha de presentar al alumno principios éticos para la convivencia de la especie en la identidad terrenal; y no precisamente desde ejemplos de lo moralmente aceptado, sino más bien en el pleno desarrollo de la conciencia de su condición de Ser Humano.

b)     Redes necesarias a construir

       Las redes que son necesarias a construir hacen relación al desarrollo inter e intrapersonal del individuo.
       Aprender a ser, desarrollando al individuo para actuar con una mayor capacidad de autonomía, responsabilidad, juicios de valores, autoconocimiento y autocritica frente a sí mismo en el contexto de la sociedad.
      Aprender a saber, construyendo  desde la base de una cultura policentrica los conocimientos necesarios que le permitan analizar y criticar información de variadas disciplinas.
      Aprender a hacer, de manera que el individuo pueda anticiparse y tomar decisiones ante las diversas situaciones que se presentan, y ser agentes activos en la construcción de su identidad social.
      Aprender a convivir, viviendo juntos en sociedad,  y  comprendiendo su entorno próximo, al mundo y las interdependencias que se producen en este contexto. También es necesario potenciar las habilidades de trabajo en equipo.

c) ¿Qué le dice Edgar Morín al Chile de hoy?

El problema de la educación del Chile de hoy se contrasta con la democracia del siglo XXI, donde el incipiente desarrollo científico y tecnológico no solo ha generado conocimiento sino también ignorancia y ceguera.

El desarrollo de múltiples disciplinas ha llevado al país a una superespecialización y la parcelación del saber, quedando solo en manos de los expertos. Por ello, el ciudadano se ve desposeído de conocimiento, y solo le queda ser dependiente de las decisiones que toman los que convierten estos saberes en poder. Se da paso con ello a la fractura de la sociedad entre una “nueva clase” y los “ciudadanos”, como señala Morín.